Bodegues modernistes

Bodegas modernistas

LOCALIZACIÓN

Sobre todo en la Conca de Barberá, Terra Alt, Tarragona y Barcelona

DESCRIPCIÓN

Las bodegas modernistas proliferaron en una coyuntura del sector agrícola marcada por la aparición de las cooperativas. El siglo XIX había acabado con la llegada de la filoxera, que empobreció al campesinado catalán, y el cooperativismo nació como alternativa para salir de esa situación a través de la unión entre los campesinos. El éxito de la fórmula y las aportaciones personales de muchos agricultores, tanto en dinero como en jornales a la obra, hicieron posibles los edificios de las bodegas cooperativas, entre los que se encuentra la mayor parte de catedrales del vino, construidas mayoritariamente entre 1915 y 1930. El ladrillo visto, la piedra, el enfoscado y la cerámica se conjugan para conseguir una estética característica y unas formas impactantes. Grandes arcadas de inspiración clásica, mucha luz en los interiores y todos los detalles tecnológicos de la época aplicados a la elaboración de vinos, son el resto de los elementos que caracterizan estos templos vinícolas.

ROL DE LAS PERSONAS

La característica principal de estas bodegas es que se crearon durante el siglo XIX y principios del XX bajo la iniciativa de las cooperativas que agruparon a los diferentes cosecheros locales para mantener la competitividad bajo esta forma colectiva. Siguen en la actualidad bajo la misma forma cooperativista tanto en su producción y comercialización, así como en su faceta turística siendo un cooperativista quien enseña la bodega a los turistas como en el caso de la bodega de Barberá de la Conca.