LOCALIZACIÓN
Zona incluida en la Denominación de origen
DESCRIPCIÓN
El bodeguero es la persona responsable de realizar las diferentes labores de la bodega que afectan a todos los procesos de elaboración, crianza y mantenimiento de la bodega. Su papel es esencial en el proceso de la elaboración del vino, ya que es el responsable de su cuidado durante el tiempo que éste permanece en la bodega. Un bodeguero debe en primer lugar ser capaz de manipular y mover barricas llenas. Hay que considerar que una barrica contiene 225 litros de vino, es decir, tiene un peso considerable. Se necesita pues técnica y habilidad pasa poder desplazarla en solitario. Otra de las habilidades singulares de este oficio es realizar eficazmente el apilamiento de barricas mediante el empleo de cuñas. Una tarea que requiere fuerza, pero sobre todo mucha habilidad para acuñar adecuadamente los diferentes pisos de barricas consiguiendo una estabilidad completa del conjunto. Complejo es también el proceso de colocación de botellas mediante la utilización de pequeños listones que se utilizan para la estabilidad del conjunto, otro proceso delicado que necesita esmero y dedicación. Otra labor que todavía se realiza en muchas bodegas es la separación de yemas de claras de huevo para la utilización de estas últimas como clarificador, ayudándose para ello de un singular ingenio. A esto hay que añadir las tareas de limpieza general de depósitos, prensas y resto de utillajes, trasiega, limpieza y desinfección de barricas y un sin fin de pequeñas tareas que surgen a diario en el interior de la bodega. Algunas de estas actuaciones se han simplificado en la actualidad. Así es muy frecuente que el apilado de barricas con cuñas se haya sustituido por durmientes metálicos que permiten su manipulación mediante medios mecánicos o el apilamiento de botellas para su crianza que ya en muchas bodegas se realiza con jaulas metálicas por la misma razón de facilidad de mecanización. No obstante, son muchas las bodegas que conservan estos trabajos con los sistemas tradicionales.
ROL DE LAS PERSONAS
Tradicionalmente, el oficio de bodeguero se aprendía en la bodega. Era habitual que una persona entrara en una bodega y se mantuviera toda la vida en la misma, pasando en ocasiones el oficio de padres a hijos dentro de la misma empresa. El conocimiento que estos profesionales llegaban a tener de las instalaciones y los procesos era completo y su reconocimiento por parte de la dirección muy alto. Esta relación de confianza que se establecía marcaba una relación que era habitualmente muy prolongada en el tiempo. Por su parte el trabajador siempre ha sentido orgullo por pertenecer a una determinada bodega, a la que se terminaba sintiendo unido no sólo profesional, sino afectivamente. Aunque en la actualidad la dinámica laboral marca otros ritmos y tipo de relaciones, esta sensación de pertenencia todavía se mantiene en muchísimas bodegas de La Rioja.