Las barracas de la huerta valenciana

LOCALIZACIÓN

Valencia

DESCRIPCIÓN

La barraca valenciana estándar es una construcción de planta rectangular. Construida con materiales de la zona como barro, cañas y paja. Suelen estar orientadas al sur. Dispone de dos fachadas. La principal tiene una puerta en su lado izquierdo, una ventana a la derecha y en muchos casos, un banco, apoyado en la ventana y un emparrado. La fachada posterior también suele disponer de una puerta de acceso. La cubierta es triangular, a dos aguas, con una notable inclinación, lo que le permite un fácil y rápido desagüe. En el espacio exterior en ocasiones se sitúan cocinas techadas, hornos circulares de leña y “seberes”, pequeñas chozas de cañizo utilizadas para almacenar y secar cebollas. La distribución interior más común parte de un amplio pasillo que recorre toda la edificación. En este espacio se desarrolla la actividad principal de la vivienda. En su parte anterior se sitúa cocina y comedor y posterior los dormitorios, tres normalmente, y un almacén. La parte superior es la andana, a la que se tenía acceso por una escalera de mano. Allí se almacenaba la cosecha.

ROL DE LAS PERSONAS

La barraca fue una edificación de tipo popular que se desarrolló en función de los pequeños espacios disponibles por sus modestos propietarios y adaptados a sus necesidades relacionadas con la huerta. Son edificaciones que se extienden sobre una base latifundista. Salvo en pequeñas excepciones en las que las barracas se reconvierten en hoteles rurales, segunda residencia modificada etc.., las demás fueron destruidas para ser sustituidas por construcciones modernas. No obstante, todas ellas han formado parte históricamente de este paisaje valenciano, y le han dado un sentido propio y característico. La vivienda tradicional es, pues un elemento a conservar junto a su propio entorno agrícola que ha dado sentido durante siglos a la historia, economía, costumbres y horizonte del territorio valenciano.