Salinas palmeras

LOCALIZACIÓN

La Palma

DESCRIPCIÓN

La primera salina palmera construida es de finales del siglo XVIII, la Salina de Los Cancajos, la última y más reciente la de Fuencaliente. Pero la tradición salinera de la Palma fue muy anterior, se conoce la actividad de extraer sal desde la Antigüedad, en que es conocido el aprovechamiento natural del agua marina que, depositada la marea, en las hondonadas naturales de las rocas, la cual al evaporarse el agua por el calor del sol, precipitaba la sal, que era utilizada con fines gastronómicos, higiénicos, médicos, etc. Hay que destacar la frecuente coincidencia de restos arqueológicos prehispánicos de cazoletas salares en las salinas del siglo XIX, lo cual nos indica la continuidad de esta importante actividad, necesaria para la alimentación, como conservante de los productos naturales (carnes, pescado) y también como condimento en la culinaria canaria. La tipología salinera en La Palma es muy variada, recibiendo distintos nombres: rebosadero, cocedero natural, salina excavada en la roca, salina llana de tajos o cristalizadores, salina construida de mortero y cal, o barro; el salero se le llama al almacén de la sal extraída. La salina de Fuencaliente se hizo al estilo de Lanzarote, con barro, el contraste paisajístico que ofrece es espléndido, combinando los azules por su ubicación a la orilla del mar, con el negro marco volcánico, el color rojizo arcilloso y el blanco deslumbrante de la sal. Estas salinas mantienen las características clásicas de que se componen los ingenios salineros: tomadero, cocedero o charcas, tajos, salero, y vivienda.

ROL DE LAS PERSONAS

Las salinas poseen un alto valor patrimonial, desde el punto de vista de la arqueología industrial, a la vez que paisajístico y medioambiental, pues son zonas de nidificación de las aves. Su interés etnográfico es muy destacable en muchos aspectos materiales e inmateriales: las construcciones, el oficio, los aprovechamientos gastronómicos, etc. Son áreas por proteger y en la medida de lo posible dar a conocer, tanto desde el punto de vista educativo, como científico y turístico.