Piononos

By 12 enero, 2021 mayo 13th, 2021 RECETAS, RECETAS - ANDALUCÍA

LOCALIZACIÓN

Santa Fe (Granada)

DESCRIPCIÓN

Ingredientes: 1 docena de huevos, 250 gramos de jarabe de azúcar, 300 gramos de harina de trigo (tamizada), 500 gramos de azúcar, Canela, Harina de maíz.

Preparación: por un lado, se hace el bizcocho para rellenar, yema pastelera y almíbar de calar. Una vez elaborados, vendrá el proceso de montar los piononos Batir 10 claras de huevo hasta que estén rígidas y agregar el jarabe de azúcar, además de la harina y la canela. Con esta masa, se hace una pasta delgada, que se estira en un plato con un papel engrasado encima. Se coloca en el horno a baja temperatura y se cocina durante 20 minutos. Con harina de maíz con sabor a canela, se hace una crema pastelera y se cubre la torta que ya se retiró del horno. Con la crema ya adentro, se enrolla el pastel y se corta en trozos de unos 3 centímetros. Se les pone una crema de yema y azúcar, luego se dora todo. La crema de yema está hecha con un litro de agua, medio kilo de azúcar y una rama de canela. Se pone el azúcar y la canela en el agua y se hierve, haciendo un jarabe. Cuando termine, se retira la canela y se agregar las yemas de huevo montadas. Se pone todo a fuego lento y se revuelve con una cuchara de madera hasta que se retire, siempre antes de que hierva.

ROL DE LAS PERSONAS

El pionono de Santa Fe se elabora con una plancha de bizcocho humedecido en almíbar, relleno de yema pastelera y canela, enrollado sobre sí mismo, y rematado con una corona de yema tostada, que simboliza el solideo con que el Papa cubre su coronilla. El nombre del pastel fue dado por su creador, Ceferino Isla González, en honor al Papa Pío IX (Pio nono según la pronunciación en italiano del nombre) por haber proclamado el dogma de la Inmaculada Concepción, de la cual Isla era muy devoto. La primera referencia localizada de este dulce aparece el 18 de marzo de 1858 en la prensa madrileña. Este dulce, en un principio, fue nombrado con dos palabras: «pio nono» o «píos nonos». Fue Leopoldo Alas «Clarín» quien, en su novela La Regenta (1884), lo incluye como una sola palabra, «pionono».