LOCALIZACIÓN
Zamora y Salamanca
DESCRIPCIÓN
El garbanzo de Fuentesúco, son las semillas de la especie Cicer arietinum L., variedad macrocarpum, ecotipo “Fuentesaúco” destinadas a consumo humano. Se comercializan envasadas como legumbre seca. Se caracteriza por la rugosidad de la piel intermedia, sin manchas superficiales, pico curvo y pronunciado. Organolépticamente tras la cocción presentan un albumen mantecoso, poco granuloso, la piel será blanda y al menos el 85% de los garbanzos deberá mantener integridad de grano y la piel adherida. El sabor será siempre agradable. El color será el resultante de una mezcla entre amarillo, blanco y marrón que da lugar a tonos crema o apagados.
ROL DE LAS PERSONAS
El garbanzo de Fuentesaúco, que se caracteriza por un tamaño de medio a grande, suele ser uno de los platos protagonista indiscutible de Castilla León: el cocido. Entre varios usos culinarios, se pueden servir como guarnición, guisados con níscalos, en potaje con bacalao o espinacas, o como integrantes de ensaladas. Son numerosos los escritos que avalan desde entonces su suprema calidad. El cultivo del garbanzo llegó a la comarca de Fuentesaúco a través de la colonización romana. Se cultiva sólo en parcelas inscritas en el Consejo Regulador. Gustan de un clima de inviernos largos y fríos con heladas frecuentes, suelos profundos, con buen drenaje, y de textura franca o franco-arenosa. Protegidos en 1569 por el rey Felipe II y plato habitual en la Corte de los Reyes; premiado en la Exposición de Agricultura de Madrid en 1857 y protegido desde el año 2002 por la Consejería de Agricultura y Ramadería con la Indicación Geográfica Protegida.