Sobado de anchoas

LOCALIZACIÓN

Industrias conserveras de la región

DESCRIPCIÓN

Profesión artesanal que ha ido pasando de generación en generación desde el siglo XVIII. El sobado a mano, consiste en quitar la piel de los bocartes, uno a uno, con una red, se limpian y se colocan en las latas de conserva. El pescado se coloca en bidones con sal y prensados y llega a las manos de las «sobadoras» tras ocho meses.

ROL DE LAS PERSONAS

«La anchoa son las manos», así describen las sobadoras su trabajo; una labor que no puede ser sustituida por máquinas y que da el sello de calidad a las conservas de anchoa cántabras, y que se ha recogido en un libro «Sobadoras de anchoa, Historias de mujeres de Santoña». Un oficio en peligro de extinción pero que fue durante mucho tiempo motor económico de las localidades costeras y que aseguraba la vida de las familias, sobre todo cuando los hombres no trabajaban en la mar.