LOCALIZACIÓN
Río Ebro y otros más de esta comunidad
DESCRIPCIÓN
Desde la Edad Media, cada otoño, cuando miles de anguilas se dirigían al mar a desovar, los habitantes de la ribera del Ebro tendían sus aparejos en el río. En todos los pueblos había al menos una familia de pescadores profesionales, que arrendaban y explotaban los más rentables puntos de captura: molinos y noriales. La documentación y la memoria oral de los ribereños nos permite reconstruir esta insólita y poco conocida interrelación entre el patrimonio hidráulico y la pesca. Era un lugar de subastas y arriendos donde la pesca tenía un lugar predominante.
ROL DE LAS PERSONAS
Lugares conservados por el Gobierno de Aragón para preservar el recuerdo de esta actividad entre las poblaciones más jóvenes.