LOCALIZACIÓN
Almuñecar (Granada)
DESCRIPCIÓN
Los restos de la antigua fábrica de Salazones de Almuñécar en la que se elaboraba el valioso Garum -especie de paté realizado con vísceras de pescado– que se exportaba a todo el Imperio, se tiene constancia ya en el s. IV a.C. Organizado en tres sectores bien diferenciados en la parte que permanece visible en la actualidad. El sector Sur en la antigüedad estaba limitado por un muro con una puerta de comunicación con el mar; dedicado a las actividades administrativas y de almacén. El sector central conforma el núcleo principal de la factoría donde se hallan las piletas de salazón del pescado, donde permanecían durante 21 días antes de ser transportados en ánforas. En el sector Norte, se encuentran los restos de un posible gran tempo dedicado a la diosa Minerva.
ROL DE LAS PERSONAS
Durante el imperio romano se produjo un auge de las salazones. La inmensidad del imperio hacía necesario contar con alimentos que resistiesen bien el tiempo. Las factorías en Hispania se situaron en Almuñécar, Adra, Cartagena y Cádiz, donde las especies más usadas fueron el atún, bonito, sardinas, caballa y anchoas. La gastronomía romana creó múltiples recetas en las que el Garum era protagonista indiscutible. Se trataba de una salsa de pescado que solía combinarse con vino -«oenogarum»-, con agua -«hydrogarum»-, con vinagre -«oxygarum»- o con aceite -«oleogarum». Las principales factorías romanas de Garum se hallaban distribuidas en la provincia romana de bética, en el sur de Hispania y los principales centros de producción y exportación de garum eran las ciudades romanas de: Gades (Cádiz) Baelo Claudia (Bolonia, Cádiz), Sexi (Almuñécar) Híspalis (Sevilla), Malaca (málaga), Cetaria, Carteia y Iulia Traducta, éstas tres últimas situadas en el arco de la bahía de Algeciras. En la actualidad se conservan varias factorías que pueden visitarse.