LOCALIZACIÓN

Ciudad Real

DESCRIPCIÓN

El melón de La Mancha I.G.P., es un melón frutos de la especie Cucumis melo L.), de la variedad botánica saccharinus (según la clasificación de C. V. Naudin, 1859), de los cultivares Piñonet o Piel de sapo, en cualquiera desus variedades comerciales, destinados a su venta en estado fresco a los consumidores: adaptado a los suelos y climatología de su zona de producción, es de la variedad «piñonet» o «piel de sapo» y tiene una fuerte presencia en el mercado nacional. Protegido desde 2004 bajo el amparo de la Indicación Geográfica Protegida, ha sabido resaltar por las cualidades refrescantes propia de esta fruta. Caben destacar su alto nivel de azúcar, un peso de entre 1,8 y 4 kg. Y su forma ovoide o elipsoidal. Posee propiedades laxantes, depurativas y es un aporte de vitaminas antioxidantes y minerales. La corteza -lisa o ligeramente rugosa – tiene un grosor medio de 0,6 a 0,8 cm. Y en ella predomina el color verde, con manchas oscuras de tamaño medio distribuidas uniformemente. Su carne es crujiente y poco fibrosa; su pulpa de color blanco o cremoso y anaranjada en la pequeña cavidad central. El melón, que fue introducido en la región por los árabes en el siglo XI, tiene un peso importante en los cultivos manchegos, ya que abarca una superficie de 13.637 ha, lo que supone un 35% y 37% sobre la superficie y producción nacional respectivamente. La zona de producción y envasado del melón bajo el amparo de la Indicación Geográfica Protegida «Melón de la Mancha I.G.P.», se encuentra en las localidades de Alcázar de San Juan, Arenales de San Gregorio, Argamasilla de Alba, Campo de Criptana, Daimiel, Herencia, Las Labores, Llanos del Caudillo, Manzanares, Membrilla, Puerto Lápice, Socuéllamos, Tomelloso, Valdepeñas y Villarta de San Juan, todas pertenecientes a la comarca natural «Mancha», situada en la parte nororiental de la provincia de Ciudad Real.

ROL DE LAS PERSONAS

Muy probablemente, el cultivo del melón fue introducido en La Mancha por los árabes. Las referencias más antiguas, son las recogidas en el original y objetivo Tratado Agrícola de Ibn Bassal al-Tulaytubí, que vivió en el siglo XI en la Taifa de Toledo. A lo largo de los siglos se han recogido numerosas referencias a su cultivo como en la obra de Pascual Madoz de mediados del siglo XIX De alta jugosidad y dulzor, se suele utilizar en la elaboración de ensaladas, acompañado de jamón serrano, como sopa fría batido con yogur; en elaboración de postres con miel y especias o con distintos sabores de helado.